La profundidad en la mezcla

La profundidad en una mezcla no se consigue simplemente bajando el fader para que un cierto instrumento parezca que esta mas lejos y así dar una cierta sensación de profundidad, y tampoco se consigue aplicando reverb por un tubo a todo aquello que queramos darle esa sensación de lejanía.  Lo mas conveniente es echar mano de las herramientas que tenemos en nuestro editor de audio, como por ejemplo la ecualización, la compresión y claro esta la reverb. Leed este interesante artículo.

La profundidad en la mezcla

 Los cambios de volumen no implican cambios de distancia: al bajar el fader, simplemente se escucha el instrumento más bajito, pero no más lejos. Y la reverb, que pensaba que sería una gran ayuda para simular la distancia, resultó que no producía el efecto deseado. en los discos “comerciales” no había mucha sensación de distancia, de hecho parece que cuanto más importante es el cantante o la canción, más cerca suena todo. Parece que la única sensación de distancia que se busca es que todo suene cerca, y lo que suena lejano suena mal y necesita arreglo.

Antes de hablar de lo que le podemos hacer a un sonido para que parezca más cercano o más lejano, vamos a hacer un pequeño experimento, solo necesitamos alguien que nos quiera regalar un minuto de su tiempo: le pediremos que se siente a leer en voz alta un libro o revista y nosotros nos moveremos por la casa escuchando con atención las diferencias en su voz. Aunque pienses que ya lo has oído muchas veces y no necesitas repetirlo, te animo a hacerlo, ten en cuenta que la memoria es muy manipulable, y quizá recuerdas algo que has construido y no es muy realista. Vamos a buscar primero los extremos: nos podremos en el punto más lejano de la casa, y escucharemos bien. Luego nos acercaremos a quien lee, hasta poner el oído a unos centímetros de su boca (para esto hace falta tener un poco de confianza). Hay que fijarse bien en los cambios de dinámica, en el balance entre graves y agudos, y en la cantidad de reverberación (o el sonido en el ambiente) que escuchamos. Seguramente sea necesario repetirlo varias veces hasta escuchar las diferencias en estos tres aspectos. Si quien nos ayuda todavía tiene paciencia, podemos buscar puntos intermedios y seguir buscando las diferencias.

¿Qué hemos oído en el experimento? 

· En cuanto a graves y agudos se nota claramente que cuando estas cerca escuchas muchos graves y bastantes agudos, y al alejarte esto cambia bastante: los graves casi desaparecen y los agudos bajan bastante, nos quedamos con los medios casi intactos. Esto lo escuchamos todos los días en la calle, en el metro o en el autobús: una persona está escuchando música con su mp3 y lo que llega a nuestros oídos son solo medios, sin embargo sabemos que si nos pusiéramos los auriculares escucharíamos todos los graves y agudos, la razón es la distancia: los graves y los agudos pierden mucho volumen a medida que nos alejamos de la fuente de sonido.

· La dinámica del sonido también cambia bastante. Los cambios en la dinámica pueden ser un poco engañosos, fijémonos en el ataque de las letras más percusivas (p, t, k), se escucha una gran pérdida de ataque al alejarse, de forma que el sonido parece menos agresivo cuando estoy lejos. Parece que esa energía, que tienen los sonidos percutivos en el ataque, se pierde fácilmente al alejarnos. Creo que aquí interviene también el cambio en la “ecualización” que hemos descrito arriba: si os fijáis, el ataque de la percusión (el transitorio) siempre es un sonido muy corto y bastante agudo, y si hemos encontrado que los agudos se pierden con la distancia, tiene lógica que éste agudo del transitorio se pierda también. También podemos notar que los sonidos más suaves desaparecen con la distancia: la respiración, el sonido de la boca al abrirse, el de la lengua al moverse en la boca, y también las palabras que se han dicho más bajitas, o las últimas sílabas de algunas palabras.

· La reverb, o el sonido reflejado que oímos también cambia. Creo que al alejarnos percibimos más claramente la reverb, pero no porque haya más, sino porque el nivel del sonido directo baja bastante de nivel y deja de enmascarar la reverb. Recuerda que los sonidos altos ocultan a los bajos, pero no los eliminan, es un cambio en nuestra percepción, no en lo que realmente suena.

Ahora que he aclarado lo que oigo con la distancia, vamos a hablar de cómo lo simulo para crear el mismo efecto o para exagerarlo. Las tres partes que he separado arriba (ecualización, dinámica y reverb) ya nos hablan de los procesadores que voy a usar:

· Con un ecualizador simularemos la profundidad al cambiar el nivel de los agudos, los graves también funcionan, pero suelen dar más problemas en la mezcla. La forma de ecualizar en agudos suele ser bastante suave,  (para la frecuencia es mejor probar cada vez, y adaptarse a lo que nos pide el resto de la mezcla) con una pendiente muy suave y cambios de ganancia lo más pequeños posible. Recordad que buscamos que algo suene cerca o lejos, no queremos cambiar su sonido. Lógicamente al subir los agudos parecerá que el instrumento se acerca, y al bajarlos estaremos alejándolo. 

· El compresor también puede prestarnos una ayuda importante. De hecho estamos acostumbrados a escuchar su efecto, y cuando normalmente escuchamos una voz comprimida, lo que estamos oyendo es una voz sonando muy muy cerca. Quiero decir que la compresión se suele usar para acercar el sonido, exagerando el ataque y controlando la envolvente del sonido original conseguimos dar esa sensación de cercanía que tanto se usa en voces de la radio y de los discos comerciales.  Recordemos que al alejarnos de nuestro lector hemos notado que sus sonidos más percutivos perdían ataque, o dicho de otra forma, los transitorios se debilitan con la distancia. Vamos a utilizar el compresor para reducir el nivel de los transitorios, y de esa manera produciremos el efecto de estar alejando el instrumento o la voz a medida que le comprimimos más. Para conseguir esto usaremos un tiempo de ataque (en el compresor) muy bajo, a veces el mínimo está bien, pero cuidado, siempre hay que tener cuidado con tiempos (de ataque y release) muy cortos porque pueden producir distorsión. El tiempo de release también debe ser bajo porque vamos a buscar una compresión muy rápida, que solo reduzca los transitorios, alrededor de 10 ó 20 milisegundos esta bien (probar otras opciones y encontraréis nuevas posibilidades).Empezamos con el umbral arriba y lo vamos bajando mientras escuchamos el instrumento, si todo funciona bien, deberíamos tener la sensación de que el instrumento se va alejando a medida que bajamos el umbral y la reducción de ganancia es mayor. ¿Hasta dónde lo bajamos? Que el oído lo decida, si vamos demasiado lejos estaremos estropeando demasiado el sonido; recordad que sólo queríamos alejarlo, si al pulsar Bypass notamos la distancia deseada habremos conseguido nuestro objetivo. Me gustaría llamar la atención aquí sobre el efecto conseguido y la diferencia entre el sonido procesado y sin procesar: lo que hemos hecho ha sido reducir (o eliminar) el transitorio, y ahora nos parece escuchar el instrumento más lejos por dos razones: ya no están esos agudos del transitorio que nos daban la información de cercanía, y al faltar este transitorio podemos escuchar el sonido que antes quedaba enmascarado: la reverb natural de la sala donde se grabó el instrumento. Otra forma de entenderlo es que al bajar el nivel del ataque podemos percibir mejor la cola del sonido. 

· El efecto que  siempre pensamos que nos ayudara a que algo suene más lejos es la reverb, pero  sólo con reverb no podemos engañar al oído. Si queremos escuchar algo a una distancia mayor tenemos que usar al menos uno de los recursos anteriores, y si queremos, añadirle un poco de reverb. La reverb por sí sola no funciona por una sencilla razón: en un teatro (por ejemplo) un sonido produce reverb cuando empieza a chocar y rebotar con las paredes, y eso es siempre después de viajar por el aire y recorrer bastante distancia. Si recordamos lo descrito arriba nos daremos cuenta que en el teatro el sonido llega a las paredes después de perder graves y agudos, y después de perder sus transitorios como efecto de la distancia. Si nosotros mandamos un sonido grabado con un micrófono cercano (lo más normal en un estudio y un escenario) al procesador de reverb, nunca tendremos un efecto realista, porque estaremos escuchando la reverb producida por unos graves, agudos y transitorios que nunca habrían llegado a las paredes de un espacio real. Sin embargo, si primero conseguimos que el instrumento suene distante y luego lo mandamos a la reverb, conseguiremos un efecto realista y nuestros oídos se tragarán la trampa.

Y por último, la pregunta más importante: ¿para qué quiero que un instrumento suene más lejos? En principio éste efecto no va a sonar nada “comercial”, los discos que venden  cientos de miles de copias suelen tener un sonido muy comprimido (para acercar) y todos los instrumentos parecen estar a un centímetro de quien escucha. Mi propuesta es probar a mezclar los sonidos cercanos con los lejanos, es sorprendente lo fácil que se encuentra el volumen para varios instrumentos cuando no todos están a la misma distancia relativa del oyente, haciendo mas fácil las mezcla de la canción.